lunes, 21 de enero de 2008

Parto programado


entrar a las 8, la conexion a maquinas, ver los detalles, que esto mide esto, que esto otro aquello... y este la frecuensia cardiaca de tu hijo.... (uf bien, estamos fuertes 133 por minuto, ese es mi chico)...
La pastilla para la induccion, pasas el tiempo, tus ojos conectados a la maquina como un monitor mas de todo aquello... Pasan las horas, todo sigue igual, al cabo de un minuto, entre que el estado de espera y la agonia de la nada, un piiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii suena de fondo, mi hijo esta empezando a no respirar, llega la matrona, desesperada grita, camillero, camillero, la mascarilla puesta, dos lagrimas asoman una pregunta y el doctor que habla que mi placenta no recistio el tratamiento, de lo que ME van a hacer, que nada ME va a pasar y yo, con mi miedo a cuesta, esboso y mi hijo? Va a estar bien, mi pequeñito? y el sonrie, como entendiendo mi desconcierto, siii, el va a estar bien paula, tranquila, como si algo me fuese a calmar. Camillero, tira pa aca, sala de operaciones, la Epidural (que si duele, no me entere) y empezar. Mientras me abren yo solo busco el monitor de mi hijo, ver como va su corazonsito, y entonces, como si saliese de mis entrañas, un gito maravilloso, un llanto aliviador. Mi chiquito como llamandome y una sola lagrima de cabe en mi rostro.